martes, 15 de abril de 2008

Dia 12 de Abril, dia del niño en Bolivia

El día 12 de abril, celebramos en Mi Rancho, El Pahuichi y Los 2 Patitos, el día del niño, estuvimos todo el día con juegos, premios, una comida entre todos que consistió en majadito, con huevo y plátano. Tuvimos a Maria Jesús, que estaba recién llegada y se vino a pasar el día con nosotros junto a su colega Elena.
Aprovecho para que lean unas letras de Antonio Corcuera, sobre los derechos del niño, como dice el titulo " una declaración de amor"

DECLARACIÓN DE AMOR

O LOS DERECHOS
DE LOS NIÑOS(*)
"Queda decretado que el mayor dolor fue
y será siempre no poder amar".
Thiago de Mello

Preámbulo
Todo niño nace con sus derechos,
como cada flor con sus pétalos.
Artículo 1
Todo ser humano es un niño,
salvo que haya cumplido 12 años
y no germine ya en su corazón una piñata.

Artículo 2
Acariciados por el arco iris
hay niños de todos los colores.
Todos tienen los mismos derechos.
Artículo 3
La vida le pertenece al niño
como la luz al amanecer.

Artículo 4
El pájaro cobija
bajo las plumas a sus polluelos.
Cada país es un árbol:
acunará al niño bajo su sombra.
Artículo 5
Un jardín para la mariposa,
el mar para los corales,
tierra para las raíces,
un regazo propio para los niños.
Artículo 6
Todo tiene nombre en el universo:
los elefantes y las hormigas,
las pestañas del girasol,
la primavera eterna de las esmeraldas.
En la escuela el niño aprenderá a deletrear su nombre.

Artículo 7
Brillen los niños rozagantes
como la salud de las manzanas.
Artículo 8
Sin agua y sin alpiste
enmudece la flauta del canario,
exhausto se apaga el corazón
del niño.
Artículo 9
Será cuidado por todos
aunque estuviese solo,
en abandono y perdido
en medio del desierto.
Artículo 10
Velar por el crecimiento natural del niño,
espiga que se yergue lozana y ligera.
Reciba los aires benéficos,
la lluvia, el sol, el legado de una buena simiente.
Artículo 11
Cabalgar sobre un caballito de madera
es uno de sus derechos.
también abrir un libro
como las hojas de una col.
Artículo 12
El Verano obligará al Invierno
a nevar tibios copos de lana fina
para que el niño se reconcilie con el frío.
Artículo 13
Ni la rosa de sonrojados atuendos,
ni el colibrí engolosinándose
de corola en corola
ni el matinal lucero de la tarde.
En el planeta nada hay más bello que un niño sonriendo.
Artículo 14
Nadie le impedirá cubrirse
con las melenas del Astro Rey.
El niño como el oso
con el abrigo puesto
es más hermoso.

Artículo 15
El Sol y la Luna gravitan
en la germinación de la semilla.
Será reprobado separar a los cachorros de la leona
a la torcaza de sus pichones,
a los niños de sus hogares.
Artículo 16
A su alrededor
en ronda todos los seres
(incluidos los abejorros)
El niño ni un segundo quede
recluido a vivir en soledad.
Artículo 17
Un viñedo gigante y egoísta
no se compara con un racimo
de uvas
alimentando los pechos
de una madre gestando.
Articulo 18
Su palabra es el gorjeo de la fuente.
Escucharla con alegría,
como escucha la hierba
el susurro de la cigarra
cuando calla la tarde.
Artículo 19
Nadie ofenderá la plegaria de una tribu,
sus símbolos, la alegoría de los rituales.
Todas las deidades lo protejan
y el niño tendrá la ilusión de tocar el cielo.
Su oración en cualquier idioma será escuchada.
Artículo 20
Lastimarle, no.
Ni con pétalo de un cisne.
Artículo 21
Por decreto de los ángeles
queda abolida de los diccionarios
la palabra látigo.
¡Hágase humo huyendo temerosa la palabra castigo!

Artículo 22
Jamás se le atarán las alas.
El viento es su compañero de aventuras
y su mejor tutor.
Artículo 23
El corazón del hombre
sea un refugio de niños
como es el piano un nidal de pájaros.
Artículo 24
Un niño impedido (de volar)
es como el ala quebrada de una gaviota.
Reclama las caricias
de una orilla de terciopelo.
Artículo 25
Cúrese al niño postrado.
Utilícese un rayo celeste
para cicratizar sin dolor
la súplica de sus heridas.
Artículo 26
Los bálsamos, las mieles,
la canción de cuna de las sirenas,
los rubores de la cucarda
sirvan para colorear
la palidez de un niño abatido.

Artículo 27
Queda prohibido reír
mientras un niño
carezca de sustento y
sea su silueta
apenas el guiñapo de una sombra.
Artículo 28
Nadie se atreverá a fatigar al niño.
Sólo le estará permitido
asombrarse, jugar y soñar:
trabajos remunerados por la luna.

Artículo 29
Ya han sufrido bastante los pájaros con el llanto de las jaulas.
Se derretirán los barrotes
al primer temblor de un niño cautivo.

Artículo 30
No hay niño culpable.
Si fueran los adultos
serán enjuiciados por un Tribunal
de Hipopótamos y Rinocerontes.

Artículo 31
En el altar o en el jardín
como el cáliz
su sexo es sagrado.

Artículo 32
Únicamente el néctar de la luna
alucinará los ensueños del niño.
Ningún otro elíxir
emponzoñará su alma
y sus manos inocentes.

Artículo 33
Sólo podrá ser reclutado
por palomas y delfines
y marchará por los aires
alimentando con terrones
de lumbre a las estrellas.
Artículo 34
Maravíllese la ventana:
una algarabía de niños
asidos a la cola de un cometa.
Artículo 35
Que su fantasía haga gruñir
a la Osa Mayor
y lleve a los niños a columpiarse
en los anillos de Saturno.
Artículo 36
Que ni la más leve nube enturbie
su horizonte.
Artículo 37
Desde el presente
sea una Edad de Oro
el futuro de los niños.

(*) Arturo Corcuera
Publicado en Revista JUNJI.
Junta Nacional de Jardines Infantiles.
Santiago - Chile.